Un grupo de trabajadores de la oficina de Correos de Montilla, junto a representantes sindicales de Comisiones Obreras (CCOO), llevaron a cabo una concentración en la calle Puerta de Aguilar durante la que reclamaron un aumento de plantilla para "poder prestar un servicio postal público de calidad", así como el fin del “desmantelamiento” del servicio que, a su juicio, se está produciendo en los últimos años.
Según explicó el montillano José Pedraza, secretario provincial de la sección sindical de CCOO en Correos, en los últimos años se han suprimido cuarenta secciones de reparto, dos de ellas en Montilla, lo que genera algunos “retrasos” en la distribución de cartas y notificaciones, que “terminan padeciendo los ciudadanos”.
“Queremos que las numerosas bajas y jubilaciones que se han producido en los últimos años se cubran en la provincia de Córdoba”, señaló Pedraza, quien responsabilizó a los responsables de la empresa de las demoras que se están registrando en algunas localidades de la provincia en el reparto de cartas y notificaciones.
Algunos de los trabajadores de la oficina de Montilla que secundaron la protesta convocada por CCOO se sumaron también a la manifestación multitudinaria que tuvo lugar un día más tarde en Sevilla, en la que participaron centenares de empleados llegados desde todos los puntos de Andalucía.
Tras una manifestación que partió de la sede de Correos en Andalucía y que concluyó en la Subdelegación del Gobierno de la comunidad autónoma, en la plaza de España, los delegados sindicales hicieron entrega de un documento en el que exigían “poner fin al desmantelamiento de Correos”, toda vez que reclamaban un aumento de plantilla.
Antonio Martín, delegado de la sección sindical de CCOO en Correos de Sevilla, expresó su satisfacción por el éxito de la convocatoria y apuntó que "la masiva manifestación y el elevado seguimiento del paro es prueba fehaciente de que los trabajadores están cansados de la dieta austericida aplicada por el Gobierno y por la Dirección de Correos".
Martín apostilló que "es hora de que se ponga punto final a la irresponsabilidad de la empresa para con la ciudadanía y los trabajadores y se negocie un incremento de plantilla suficiente que permita mejorar las condiciones laborales y prestar un servicio postal público de calidad de forma diaria, algo que no está ocurriendo en los últimos años".
Asimismo, Martín aseguró que las medidas de ajuste realizadas en los últimos años se han incrementado en los últimos meses, “con especial virulencia en las unidades de reparto”, cuyas consecuencias más visibles son los “recortes sistemáticos de plantilla por amortización de puestos de trabajo como consecuencia de jubilaciones, traslados u otros motivos”, así como la reordenación de las secciones de reparto, “aumentando, de manera desproporcionada, la carga de trabajo individual y la aplicación de una agenda oculta de reconversión de empleo fijo en temporal”.
“Estos recortes, no solo afectan de forma negativa a los propios trabajadores, sino al conjunto de la ciudadanía que ve cómo en muchos centros de trabajo se está acumulando correo registrado, certificaciones administrativas, paquetería y otros envíos sin poder efectuarse el reparto durante los cinco días a la semana que la legislación postal establece”, recordó el dirigente sindical.
Por otro lado, CCOO anunció que seguirá manteniendo reuniones con instituciones, ayuntamientos y partidos políticos para que “se ponga freno al atropello al que se está sometiendo a los trabajadores y se garantice la prestación del servicio postal público a todos los ciudadanos”. Por último, el sindicato advirtió que “si no hay movimientos significativos a corto plazo, Correos estará expuesto a una altísima conflictividad, incluyendo paros y huelgas, que afectará al intenso proceso electoral que se desarrollará en los próximos meses”.
Según explicó el montillano José Pedraza, secretario provincial de la sección sindical de CCOO en Correos, en los últimos años se han suprimido cuarenta secciones de reparto, dos de ellas en Montilla, lo que genera algunos “retrasos” en la distribución de cartas y notificaciones, que “terminan padeciendo los ciudadanos”.
“Queremos que las numerosas bajas y jubilaciones que se han producido en los últimos años se cubran en la provincia de Córdoba”, señaló Pedraza, quien responsabilizó a los responsables de la empresa de las demoras que se están registrando en algunas localidades de la provincia en el reparto de cartas y notificaciones.
Algunos de los trabajadores de la oficina de Montilla que secundaron la protesta convocada por CCOO se sumaron también a la manifestación multitudinaria que tuvo lugar un día más tarde en Sevilla, en la que participaron centenares de empleados llegados desde todos los puntos de Andalucía.
Tras una manifestación que partió de la sede de Correos en Andalucía y que concluyó en la Subdelegación del Gobierno de la comunidad autónoma, en la plaza de España, los delegados sindicales hicieron entrega de un documento en el que exigían “poner fin al desmantelamiento de Correos”, toda vez que reclamaban un aumento de plantilla.
Antonio Martín, delegado de la sección sindical de CCOO en Correos de Sevilla, expresó su satisfacción por el éxito de la convocatoria y apuntó que "la masiva manifestación y el elevado seguimiento del paro es prueba fehaciente de que los trabajadores están cansados de la dieta austericida aplicada por el Gobierno y por la Dirección de Correos".
Martín apostilló que "es hora de que se ponga punto final a la irresponsabilidad de la empresa para con la ciudadanía y los trabajadores y se negocie un incremento de plantilla suficiente que permita mejorar las condiciones laborales y prestar un servicio postal público de calidad de forma diaria, algo que no está ocurriendo en los últimos años".
Asimismo, Martín aseguró que las medidas de ajuste realizadas en los últimos años se han incrementado en los últimos meses, “con especial virulencia en las unidades de reparto”, cuyas consecuencias más visibles son los “recortes sistemáticos de plantilla por amortización de puestos de trabajo como consecuencia de jubilaciones, traslados u otros motivos”, así como la reordenación de las secciones de reparto, “aumentando, de manera desproporcionada, la carga de trabajo individual y la aplicación de una agenda oculta de reconversión de empleo fijo en temporal”.
“Estos recortes, no solo afectan de forma negativa a los propios trabajadores, sino al conjunto de la ciudadanía que ve cómo en muchos centros de trabajo se está acumulando correo registrado, certificaciones administrativas, paquetería y otros envíos sin poder efectuarse el reparto durante los cinco días a la semana que la legislación postal establece”, recordó el dirigente sindical.
Por otro lado, CCOO anunció que seguirá manteniendo reuniones con instituciones, ayuntamientos y partidos políticos para que “se ponga freno al atropello al que se está sometiendo a los trabajadores y se garantice la prestación del servicio postal público a todos los ciudadanos”. Por último, el sindicato advirtió que “si no hay movimientos significativos a corto plazo, Correos estará expuesto a una altísima conflictividad, incluyendo paros y huelgas, que afectará al intenso proceso electoral que se desarrollará en los próximos meses”.
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍAS: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍAS: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
