El Hospital de Alta Resolución de Puente Genil (Córdoba) ha llevado a cabo su tercera Jornada sobre Acidentabilidad Infantil, dirigida a madres, padres y cuidadores de menores con algún tipo de discapacidad, pertenecientes a la asociación Disgenil de atención temprana. La sesión formativa, a la que han acudido una treintena de personas, ha sido impartida por las enfermeras del área de Urgencias del hospital Ana María Parque, Vanesa Juárez y Manuela García.
La charla se ha centrado en la prevención de los accidentes más frecuentes que ocurren en cada etapa evolutiva de los menores, tanto en el ámbito doméstico como en la calle. Los profesionales han incidido en la importancia que tiene la creación de una "cultura preventiva" entre los padres y madres, con el fin de sensibilizarlos para que adopten una actitud responsable ante los riesgos de que sus hijos e hijas puedan sufrir un accidente.
En este sentido se ha implicado también a los monitores y monitoras de la asociación Disgenil como pilares fundamentales en el apoyo a la educación de los menores y como encargados también de su cuidado y vigilancia durante parte del día.
Para ello, se les ha entregado como material de apoyo la guía sobre del Programa de Intervención Educativa "Aprende a crecer con seguridad", editada por la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, con la colaboración de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, cuyo objetivo principal es promocionar la cultura preventiva en accidentabilidad a través de los centros escolares.
En una segunda fase de la jornada, se ha instruido a los monitores y monitoras de forma práctica en el tratamiento de las posibles lesiones que se pueden producir en el caso de que ocurra un accidente, prestando especial atención a aquellos que suceden con mayor frecuencia, como por ejemplo: traumatismos, quemaduras, atragantamientos, heridas, electrocución, ingestión de sustancias tóxicas, hemorragias, fracturas o paradas cardiorrespiratorias.
Igualmente, los participantes han podido llevar a cabo prácticas con distintos materiales sanitarios y se han escenificado situaciones que pueden ocurrir en su ámbito laboral. Por último, se ha llevado a cabo un taller de reanimación cardiopulmonar pediátrica, donde se han desarrollado actividades de simulación utilizando maniquíes para adquirir las habilidades necesarias en soporte vital básico.
Al finalizar, se ha establecido un tiempo de debate, donde los participantes han compartido inquietudes y experiencias en relación a los accidentes infantiles y han desarrollado ideas importantes para la creación de espacios seguros en su ámbito laboral y para la divulgación de la cultura de prevención entre los padres, madres y menores pertenecientes a la asociación pontana.
Accidentabilidad Infantil
Los accidentes infantiles suponen en Andalucía la cuarta causa de muerte entre chicos y chicas menores de 15 años, según el Instituto Nacional de Estadística, mientras que en la media de España suponen la tercera causa de fallecimientos. La accidentabilidad infantil representa un importante problema de salud pública. Según Unicef, más de 20.000 menores entre 1 y 14 años mueren cada año por accidente en los países más ricos del mundo.
La charla se ha centrado en la prevención de los accidentes más frecuentes que ocurren en cada etapa evolutiva de los menores, tanto en el ámbito doméstico como en la calle. Los profesionales han incidido en la importancia que tiene la creación de una "cultura preventiva" entre los padres y madres, con el fin de sensibilizarlos para que adopten una actitud responsable ante los riesgos de que sus hijos e hijas puedan sufrir un accidente.
En este sentido se ha implicado también a los monitores y monitoras de la asociación Disgenil como pilares fundamentales en el apoyo a la educación de los menores y como encargados también de su cuidado y vigilancia durante parte del día.
Para ello, se les ha entregado como material de apoyo la guía sobre del Programa de Intervención Educativa "Aprende a crecer con seguridad", editada por la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, con la colaboración de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, cuyo objetivo principal es promocionar la cultura preventiva en accidentabilidad a través de los centros escolares.
En una segunda fase de la jornada, se ha instruido a los monitores y monitoras de forma práctica en el tratamiento de las posibles lesiones que se pueden producir en el caso de que ocurra un accidente, prestando especial atención a aquellos que suceden con mayor frecuencia, como por ejemplo: traumatismos, quemaduras, atragantamientos, heridas, electrocución, ingestión de sustancias tóxicas, hemorragias, fracturas o paradas cardiorrespiratorias.
Igualmente, los participantes han podido llevar a cabo prácticas con distintos materiales sanitarios y se han escenificado situaciones que pueden ocurrir en su ámbito laboral. Por último, se ha llevado a cabo un taller de reanimación cardiopulmonar pediátrica, donde se han desarrollado actividades de simulación utilizando maniquíes para adquirir las habilidades necesarias en soporte vital básico.
Al finalizar, se ha establecido un tiempo de debate, donde los participantes han compartido inquietudes y experiencias en relación a los accidentes infantiles y han desarrollado ideas importantes para la creación de espacios seguros en su ámbito laboral y para la divulgación de la cultura de prevención entre los padres, madres y menores pertenecientes a la asociación pontana.
Accidentabilidad Infantil
Los accidentes infantiles suponen en Andalucía la cuarta causa de muerte entre chicos y chicas menores de 15 años, según el Instituto Nacional de Estadística, mientras que en la media de España suponen la tercera causa de fallecimientos. La accidentabilidad infantil representa un importante problema de salud pública. Según Unicef, más de 20.000 menores entre 1 y 14 años mueren cada año por accidente en los países más ricos del mundo.
REDACCIÓN / CAMPIÑA DIGITAL
