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El chef cordobés Kisko García destaca la transmisión de la gastronomía a través de la Fiesta del Vino Nuevo

La localidad de Moriles celebró este fin de semana su tradicional Fiesta del Vino Nuevo, una cita que sirvió de escenario para la presentación de los primeros caldos procedentes de la cosecha de este año en un acto en el que el cocinero cordobés, Kisko García, se convirtió en Padrino de Honor de los Vinos Nuevos como reconocimiento a su labor de promoción de estos productos.



García, que fue recibido por la Corporación Municipal en el Ayuntamiento, donde firmó en el Libro de Honor, estuvo acompañado en el acto de presentación del vino nuevo por la alcaldesa de Moriles, Francisca Carmona; el Delegado Territorial de Agricultura de la Junta de Andalucía, Francisco Zurera; y la Delegada de Turismo de la Diputación de Córdoba, Carmen María Gómez.

El nuevo Padrino de Honor del Vino Nuevo, Kisko García, fue presentado por la alcaldesa de Moriles, como "más que cocinero o chef", sino más bien como "doctor en contrastes y máster en armonías por la universidad de la cocina", acreedor de la prestigiosa Estrella Michelin, lo que lo convierte en uno de los jóvenes valores de la cocina cordobesa. "Su labor de promoción de nuestro vino es más que evidente, elevándolo a la categoría de nobleza en la permanente búsqueda de la armonía y el contraste que su cocina lleva a cabo diariamente", defendió Carmona.

Por su parte, el Padrino del Vino Nuevo, que se mostró muy agradecido al pueblo de Moriles por su nombramiento, destacó su vinculación a los caldos cordobeses desde su niñez gracias a su padre que fue quien lo inició en el conocimiento de los mismos. "Si tengo algún don es saber transmitir mis sentimientos a través de la cocina y no sé qué sería de mi cocina sin los vinos de Moriles", explicó el cocinero.

Kisko García nació en Córdoba en 1978, se formó en la Escuela de Hostelería y pese a su juventud tiene ya una dilatada trayectoria de la que dan fe su paso por prestigiosos restaurantes como El Café de París, Tragabuches, Casa Marcial o el Celler de Can Roca. En 2005 regresa a Córdoba para hacerse cargo de la cocina del restaurante familiar El Choco. En 2011 la prestigiosa guía Michelín le concedió una estrella.

Desde sus inicios, Kisko ha sido reconocido como un joven y prometedor valor de la cocina andaluza, participando en campañas internacionales de promoción de la cocina española y ha sido reconocido como Joven Cocinero Revelación de Andalucía.

En esta ocasión, la Fiesta del Vino Nuevo sirvió como marco de presentación de los vinos nuevos del Lagar de Antonio Doblas, Lagar de Casablanca, Lagar de El Monte, la Cooperativa Vitivinícola de Nuestra Señora del Rosario y la Cooperativa Vitivinícola San Jerónimo.

REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
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