La habitual tranquilidad que se percibe en un municipio como Monturque se vio ayer rota por un inesperado atraco registrado en una sucursal bancaria que causó sorpresa y conmoción entre los vecinos. Poco después de las 9.00 de la mañana, un hombre encapuchado asaltó, a punta de pistola, la oficina con la que La Caixa cuenta en pleno centro de Monturque, en la confluencia de las calles Padre Curiel, Colón, Ramón y Cajal y La Plata, a escasos 400 metros del Ayuntamiento.
Según confirmaron a Campiña Digital varios testigos, el atracador accedió a la entidad bancaria en solitario, pese a que en el interior de la misma había algunos clientes. "Apuntó a la muchacha con una pistola y le gritó que le diera el dinero", narró una vecina, que aseguró que el ladrón "se puso nervioso y se marchó enseguida".
Los sistemas de seguridad con los que cuenta la sucursal, que incluyen una caja fuerte de apertura retardada con aviso automático a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, impidieron que el ladrón pudiera hacerse con una cantidad elevada de dinero.
Para emprender su huída, el atracador se valió del coche de un cliente que acababa de detenerse en la puerta de la entidad financiera y que había abandonado su vehículo con las llaves en el contacto.
De inmediato, la Guardia Civil estableció un dispositivo de control que cerró los principales accesos y salidas al municipio de la Campiña Sur, lo que permitió localizar el automóvil que el ladrón sustrajo para huir del lugar de los hechos, aunque sin rastro del autor material del atraco.
Tras el incidente, que causó un gran revuelo en Monturque, La Caixa cerró la oficina al público para poder realizar las labores de arqueo y recuento de fondos. De igual manera, la única empleada que se encontraba en la entidad en el momento del robo se trasladó a su domicilio "con evidentes signos de nerviosismo", según algunos vecinos.
En declaraciones a este periódico, la alcaldesa, Teresa Romero, expresó su "sorpresa" por lo acontecido a escasos 400 metros del Ayuntamiento y reconoció que "un suceso de estas características es algo excepcional" en un municipio como Monturque, "que suele ser bastante tranquilo".
Según confirmaron a Campiña Digital varios testigos, el atracador accedió a la entidad bancaria en solitario, pese a que en el interior de la misma había algunos clientes. "Apuntó a la muchacha con una pistola y le gritó que le diera el dinero", narró una vecina, que aseguró que el ladrón "se puso nervioso y se marchó enseguida".
Los sistemas de seguridad con los que cuenta la sucursal, que incluyen una caja fuerte de apertura retardada con aviso automático a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, impidieron que el ladrón pudiera hacerse con una cantidad elevada de dinero.
Para emprender su huída, el atracador se valió del coche de un cliente que acababa de detenerse en la puerta de la entidad financiera y que había abandonado su vehículo con las llaves en el contacto.
De inmediato, la Guardia Civil estableció un dispositivo de control que cerró los principales accesos y salidas al municipio de la Campiña Sur, lo que permitió localizar el automóvil que el ladrón sustrajo para huir del lugar de los hechos, aunque sin rastro del autor material del atraco.
Tras el incidente, que causó un gran revuelo en Monturque, La Caixa cerró la oficina al público para poder realizar las labores de arqueo y recuento de fondos. De igual manera, la única empleada que se encontraba en la entidad en el momento del robo se trasladó a su domicilio "con evidentes signos de nerviosismo", según algunos vecinos.
En declaraciones a este periódico, la alcaldesa, Teresa Romero, expresó su "sorpresa" por lo acontecido a escasos 400 metros del Ayuntamiento y reconoció que "un suceso de estas características es algo excepcional" en un municipio como Monturque, "que suele ser bastante tranquilo".
J.P. BELLIDO / REDACCIÓN
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
FOTOGRAFÍA: JOSÉ ANTONIO AGUILAR
