El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Montilla presentará una moción al Pleno de la Corporación en defensa del sector económico de la vid y el vino de la zona Montilla-Moriles y de rechazo a la posibilidad de que el Gobierno central cree un nuevo impuesto que grave el consumo del vino.
El concejal socialista Rafael Llamas expresó su rechazo a la creación de un posible nuevo impuesto sobre el vino, recogido en el Informe de la Comisión de Expertos para la Reforma del Sistema Tributario Español que fue entregado hace unos días en el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
A juicio del edil montillano, “el vino es un alimento, como bien reconoce la actual legislación española, y en Montilla, así como en el conjunto de municipios que integran la Denominación de Origen Montilla-Moriles, es un pilar importante de desarrollo económico y parte esencial de nuestra cultura”.
En este sentido, Rafael Llamas hizo referencia al peso que el sector vitivinícola tiene en el marco Montilla-Moriles, con unas 90 empresas entre bodegas, cooperativas y lagares, casi 4.000 viticultores y una extensión dedicada al cultivo de la vid de más de 7.000 hectáreas.
“Imponer más impuestos sobre el vino es volver la cara a la realidad por la que está pasando este sector de nuestra economía, que tanta vinculación tiene con Montilla, y condenarlo a sufrir unos daños de los que difícilmente podría reponerse”, afirmó el edil socialista, que consideró una “obligación” para el Ayuntamiento de Montilla hacer llegar al Consejo de Ministros “nuestro rechazo a una medida muy dañina para nuestra ciudad”.
“En nuestra tierra, el vino no es un producto relacionado exclusivamente con las empresas vitivinícolas, sino que es un motor actual y de futuro para el desarrollo del turismo, del amplio y variado sector servicios, especialmente de la hostelería, y un componente de identidad paisajística, medioambiental y cultural”, defendió Rafael Llamas, para quien “los efectos negativos sobre la economía de nuestra ciudad serían graves e inevitables si el Gobierno decidiera aplicar un impuesto sobre el vino”.
Llamas afirmó que “ante esta amenaza sobre la economía de nuestra tierra, debemos reaccionar rápido y de manera unida, porque este asunto no puede ser reivindicación de un partido concreto, sino de todos los partidos políticos, ya que estamos defendiendo el interés general de Montilla”.
Por este motivo, el concejal socialista justificó la importancia de que la moción del Grupo Municipal Socialista sea aprobada por unanimidad del Pleno de la Corporación y se le dé traslado a los ayuntamientos de la Denominación de Origen Montilla-Moriles para que se sumen a ella.

El concejal socialista Rafael Llamas expresó su rechazo a la creación de un posible nuevo impuesto sobre el vino, recogido en el Informe de la Comisión de Expertos para la Reforma del Sistema Tributario Español que fue entregado hace unos días en el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
A juicio del edil montillano, “el vino es un alimento, como bien reconoce la actual legislación española, y en Montilla, así como en el conjunto de municipios que integran la Denominación de Origen Montilla-Moriles, es un pilar importante de desarrollo económico y parte esencial de nuestra cultura”.
En este sentido, Rafael Llamas hizo referencia al peso que el sector vitivinícola tiene en el marco Montilla-Moriles, con unas 90 empresas entre bodegas, cooperativas y lagares, casi 4.000 viticultores y una extensión dedicada al cultivo de la vid de más de 7.000 hectáreas.
“Imponer más impuestos sobre el vino es volver la cara a la realidad por la que está pasando este sector de nuestra economía, que tanta vinculación tiene con Montilla, y condenarlo a sufrir unos daños de los que difícilmente podría reponerse”, afirmó el edil socialista, que consideró una “obligación” para el Ayuntamiento de Montilla hacer llegar al Consejo de Ministros “nuestro rechazo a una medida muy dañina para nuestra ciudad”.
“En nuestra tierra, el vino no es un producto relacionado exclusivamente con las empresas vitivinícolas, sino que es un motor actual y de futuro para el desarrollo del turismo, del amplio y variado sector servicios, especialmente de la hostelería, y un componente de identidad paisajística, medioambiental y cultural”, defendió Rafael Llamas, para quien “los efectos negativos sobre la economía de nuestra ciudad serían graves e inevitables si el Gobierno decidiera aplicar un impuesto sobre el vino”.
Llamas afirmó que “ante esta amenaza sobre la economía de nuestra tierra, debemos reaccionar rápido y de manera unida, porque este asunto no puede ser reivindicación de un partido concreto, sino de todos los partidos políticos, ya que estamos defendiendo el interés general de Montilla”.
Por este motivo, el concejal socialista justificó la importancia de que la moción del Grupo Municipal Socialista sea aprobada por unanimidad del Pleno de la Corporación y se le dé traslado a los ayuntamientos de la Denominación de Origen Montilla-Moriles para que se sumen a ella.
REDACCIÓN / CAMPIÑA DIGITAL