Las quejas vecinales ante la presencia de ratas y cucarachas en varios barrios de Montilla siguen en aumento. A las denuncias planteadas desde hace semanas por los residentes en la calle Almodóvar del Campo, una vía a medio urbanizar en la zona de Santo Domingo, se han sumado en los últimos días las quejas de vecinos de puntos tan distantes como la calle Julio Romero de Torres, frente a las Bodegas Pérez Barquero, o la calle Arrumbadores, en las inmediaciones del Centro de Día de Personas Mayores.
Del mismo modo, vecinos de la calle Melgar alertaron a Montilla Digital de la existencia de una plaga de cucarachas que está afectando, incluso, a domicilios particulares. "Entran a la casa por el alcantarillado, a través de los caños", aseguró una de las afectadas, quien reclamó al Consistorio una "actuación urgente" para erradicar este problema "de salud pública".
El concejal socialista Emilio Polonio aseguró ayer que las plagas de ratas y cucarachas que se están detectando en distintas zonas de Montilla y que algunos ciudadanos están denunciando en el Ayuntamiento son "consecuencia directa" de no haberse llevado a cabo los "adecuados trabajos preventivos de limpieza y fumigación que cada año han de realizarse en la red de alcantarillado".
Polonio, que cursó una visita a la calle Almodóvar del Campo, donde existe desde hace meses un socavón en la calzada que, a juicio de los vecinos, propicia la presencia de roedores en la zona, lamentó la "cantidad de quejas" que se están registrando en el Consistorio desde hace semanas y que, además de suponer "cierto peligro" para la salud pública, "dañan la imagen" del municipio, al haber trascendido a medios de comunicación de ámbito regional.
"Estamos ante un ejemplo más de mala gestión del dinero público por parte de un equipo de gobierno que deja de gastar en lo necesario para luego derrochar en lo superfluo", afirmó Emilio Polonio, quien denunció la "situación de abandono en la que se encuentra la ciudad" desde que Federico Cabello de Alba es alcalde.
A juicio del edil socialista, "la falta de mantenimiento de las calles, los parques y los jardines" contrasta con el excesivo gasto en "festejos, eventos y propaganda" que, según Emilio Polonio, "sólo buscan dar una apariencia de lo que, lamentablemente, no es".
Según los testimonios recogidos por este periódico, la presencia de roedores también se ha dejado notar en Virgen de Belén y Virgen de la Rosa, otras dos calles del sector norte de Montilla, próximas a la calle Almodóvar del Campo, donde sus vecinos tratan de combatir la plaga con venenos.
"Algunas ratas se esconden en los bajos de los coches y a una vecina le royeron los cables del motor", indicó un residente en esta calle que discurre paralela a la avenida de Pío XII, que conduce hasta la vecina localidad de Espejo.
Quejas por excrementos de perros y caballos
Las denuncias vecinales no se limitan a la presencia de ratas o cucarachas. En las últimas semanas, residentes en el entorno de La Silera y de la iglesia de San Agustín vienen mostrando sus quejas por las molestias que provocan los excrementos de perros sobre los acerados de la calle Ancha y en la misma plaza del Obispo Pérez Muñoz, un lugar muy frecuentado por ancianos de la Residencia San Juan de Dios.
Por el contrario, varios propietarios de perros han denunciado ante este periódico el "agravio comparativo" que supone la normativa municipal que les obliga a recoger los excrementos de sus mascotas "y no así a los jinetes y amazonas que poseen un caballo". A juicio de estos vecinos, "si se nos denuncia a unos, se debería denunciar también a los otros porque los excrementos de caballo son mucho más molestos".
Del mismo modo, vecinos de la calle Melgar alertaron a Montilla Digital de la existencia de una plaga de cucarachas que está afectando, incluso, a domicilios particulares. "Entran a la casa por el alcantarillado, a través de los caños", aseguró una de las afectadas, quien reclamó al Consistorio una "actuación urgente" para erradicar este problema "de salud pública".
El concejal socialista Emilio Polonio aseguró ayer que las plagas de ratas y cucarachas que se están detectando en distintas zonas de Montilla y que algunos ciudadanos están denunciando en el Ayuntamiento son "consecuencia directa" de no haberse llevado a cabo los "adecuados trabajos preventivos de limpieza y fumigación que cada año han de realizarse en la red de alcantarillado".
Polonio, que cursó una visita a la calle Almodóvar del Campo, donde existe desde hace meses un socavón en la calzada que, a juicio de los vecinos, propicia la presencia de roedores en la zona, lamentó la "cantidad de quejas" que se están registrando en el Consistorio desde hace semanas y que, además de suponer "cierto peligro" para la salud pública, "dañan la imagen" del municipio, al haber trascendido a medios de comunicación de ámbito regional.
"Estamos ante un ejemplo más de mala gestión del dinero público por parte de un equipo de gobierno que deja de gastar en lo necesario para luego derrochar en lo superfluo", afirmó Emilio Polonio, quien denunció la "situación de abandono en la que se encuentra la ciudad" desde que Federico Cabello de Alba es alcalde.
A juicio del edil socialista, "la falta de mantenimiento de las calles, los parques y los jardines" contrasta con el excesivo gasto en "festejos, eventos y propaganda" que, según Emilio Polonio, "sólo buscan dar una apariencia de lo que, lamentablemente, no es".
Según los testimonios recogidos por este periódico, la presencia de roedores también se ha dejado notar en Virgen de Belén y Virgen de la Rosa, otras dos calles del sector norte de Montilla, próximas a la calle Almodóvar del Campo, donde sus vecinos tratan de combatir la plaga con venenos.
"Algunas ratas se esconden en los bajos de los coches y a una vecina le royeron los cables del motor", indicó un residente en esta calle que discurre paralela a la avenida de Pío XII, que conduce hasta la vecina localidad de Espejo.
Quejas por excrementos de perros y caballos
Las denuncias vecinales no se limitan a la presencia de ratas o cucarachas. En las últimas semanas, residentes en el entorno de La Silera y de la iglesia de San Agustín vienen mostrando sus quejas por las molestias que provocan los excrementos de perros sobre los acerados de la calle Ancha y en la misma plaza del Obispo Pérez Muñoz, un lugar muy frecuentado por ancianos de la Residencia San Juan de Dios.
Por el contrario, varios propietarios de perros han denunciado ante este periódico el "agravio comparativo" que supone la normativa municipal que les obliga a recoger los excrementos de sus mascotas "y no así a los jinetes y amazonas que poseen un caballo". A juicio de estos vecinos, "si se nos denuncia a unos, se debería denunciar también a los otros porque los excrementos de caballo son mucho más molestos".
REDACCIÓN / CAMPIÑA DIGITAL
